Quotidianitat, Llar d'Infants Els Pinetons Matadepera

Todo el tiempo en la escuela es educativo.

Aprovechamos el valor de lo que es cotidiano como una oportunidad de aprendizaje. El momento de llegada, los buenos días, los momentos de cuidado, los hábitos, las comidas, el tiempo de descanso, el juego y todos los momentos espontáneos conforman situaciones con gran valor educativo. Todos ellos dan al niño autonomía, seguridad y la acercan a la comprensión del mundo que le rodea. La cotidianidad es el eje vertebrador del día a día en Els Pinetons.

Queremos destacar:

  • Los momentos de cuidado:
    Son unos momentos privilegiados de relación entre el niño y el adulto. El niño va tomando conciencia del cuidado de uno mismo y el adulto le proporciona la ayuda y el afecto que requiere. Así un cambio de pañal, lavarse las manos o la cara se convierten momentos de bienestar físico y emocional al mismo tiempo que un aprendizaje a través de hábitos y rutinas.
  • Las comidas:
    Los ratos de comidas son momentos tranquilos y relajados para promover las relaciones afectivas y sociales de los niños. Además, la organización que hacemos de las comidas favorece la autonomía personal de los niños y niñas, así como aprender unas rutinas y unos hábitos adecuados a su edad madurativa.
  • El juego y el movimiento libre:
    Una de las tareas más importantes que debe hacer un niño para desarrollarse con salud y felicidad es jugar. La actividad espontánea es la base de los aprendizajes ya sea escuchando, observando o manipulando directamente todo lo que tienen a su alcance. Utilizan sus posibilidades motoras, sensoriales, emocionales, cognitivas y comunicativas mientras se mueven libremente por el aula.
  • Los valores y el crecimiento emocional y relacional:
    Educar personas para vivir y convivir en nuestro mundo implica trabajar valores como el respeto, la empatía, el compartir, el escuchar, el cooperar… Desde pequeños es importante que los niños se sientan acompañados emocionalmente; poniendo nombre a las emociones que sienten, las validan y les ayudan a iniciarse en la propia regulación emocional y en la gestión que hacen hacia los demás.